Hoy nos gustaría debatir el tema de la ira. ¿Qué función desempeña la ira en el camino de los buscadores espirituales? ¿Cómo podemos comprender la raíz del problema de nuestra ira? ¿Cómo podemos equilibrar la ira y utilizarla a modo de catalizador para nuestro crecimiento espiritual?
(Canaliza Jim)
Q’uo
Soy Q’uo y os saludamos, queridos amigos, en el amor y en la luz esta tarde. Como siempre, nos sentimos honrados al habernos pedido unirnos hoy a vuestro círculo de búsqueda. Siempre estamos dispuestos a unirnos a vosotros, encantados una vez más de estar con este círculo de búsqueda, porque siempre os acompaña un amor y una luz que nos maravilla, porque vivís en la oscuridad de una ilusión en la que parece haber muy poco de estas cualidades. Como siempre, nos gustaría pediros un favor, y es que utilicéis vuestro propio discernimiento al escuchar nuestras palabras, porque no queremos que se nos vea como alguna clase de autoridad infalible. Hemos recorrido más del camino que ahora recorréis vosotros y estamos dispuestos a ofrecer la experiencia que hemos adquirido en este viaje. De ningún modo queremos resultaros un escollo, de modo que si decimos alguna palabra que no os parezca verdadera, dejadla atrás y tomad solamente aquello que tenga significado para vuestro viaje espiritual, ya que por el momento, todos vosotros habéis adquirido gran experiencia como buscadores de la verdad.
Habéis venido a esta ilusión para aprender, para crecer, para servir a los demás, y para buscar al Único Creador en todo. ¿Por qué habríais de venir a hacer una cosa así? De donde estabais antes de venir aquí era obvio que todo es uno, que el Creador existe en todas las cosas, en cada entidad, que el amor es el poder que hizo la Creación, y que la Creación está hecha de luz. De donde provenís hay alegría; hay propósito; hay energía. Entonces, ¿por qué habríais de entrar en una ilusión de oscuridad en la que habéis puesto el velo del olvido entre vuestro consciente y vuestra mente subconsciente? ¿Por qué arriesgaros a olvidar toda la verdad que lleváis dentro de vosotros mismos, en cada célula de vuestro ser? Deseáis aprender más de lo que puede aprenderse en un ambiente en el que propósito, poder, dirección, unidad están a la vista, porque en aquellos reinos de naturaleza sublime de la Creación, el progreso se lleva a cabo mucho más lentamente, porque hay poco contra lo que empujar, pocos motivos para ejercitar vuestro músculo espiritual, diríamos. Sí, allí hay crecimiento, pero es mucho más lento de lo que es posible dentro de vuestra ilusión de tercera densidad.
¿Qué os ofrece esta ilusión que es tan importante y que permite vuestro crecimiento de una manera que ninguna otra ilusión puede? El hecho de que debéis buscar diligente, consistentemente, todos los días aquellas verdades que creéis que son verdad. Os ponéis a prueba a vosotros mismos de muchas maneras cada día de que lo que estáis haciendo aquí es revelar lo que ha permanecido oculto: la verdad de la Creación. Este esfuerzo es lo que os polariza más eficientemente que cualquier esfuerzo hecho en las densidades más altas o en los planos interiores de vuestro propio camino, y por ello estáis aquí, aprendiendo las lecciones que habéis escogido antes de encarnar para intentar aprender.
En muchas ocasiones deseáis acrecentar vuestra percepción de la compasión, del amor, de la comprensión. Todas estas son facetas de la misma cualidad, queridos amigos. ¿Y cómo lo hacéis? Antes que nada, podemos deciros que no programáis más amor, más compasión—programáis justo lo contrario, queridos amigos, programáis la falta de compasión, la falta de amor, la falta de comprensión, la falta de simpatía, porque al hacerlo, ponéis en marcha dentro de vuestra propia alma el deseo de resolver estos enigmas; La ira es uno de los grandes enigmas de vuestra ilusión; la ira no es posible en las densidades más altas, porque allí sólo es posible la unidad, la alegría, la paz y el entendimiento. Pero aquí, en vuestra ilusión de tercera densidad, es posible experimentar la ira, porque es posible ver a una persona separada de otra, y sentir una emoción que no sea amor para con otro yo, o quizás incluso para con el yo, porque vuestra ira puede ir dirigida en todas direcciones. Para la entidad consciente que es conocedora del proceso de búsqueda dentro de la ilusión de la tercera densidad, si existe el deseo de alcanzar más amor, más compasión, [entonces] la falta de ese amor y compasión—en forma de ira o de la no aceptación de otros yoes, o la irritación, o la impaciencia, cualquiera que sea la forma que pueda adoptar su ira—se dirige hacia sí mismo.
Por lo tanto, a medida que avanzáis en vuestras actividades diarias encontráis varias formas de catalizador que os ofrecen la oportunidad de ver la ira brotar dentro de vuestra conciencia, dentro de vuestra experiencia, y en el momento que surge, estáis a su merced . La ira brama a sus anchas, como un fuego dentro de vosotros, y quema lo que toca, que es vuestra consciencia, y tal vez la consciencia que los demás tienen de ti. Sin embargo, como hemos dicho, las entidades orientadas positivamente suelen programar este enojo hacia el yo al modo en que el conocido como J descubrió, es muy efectivo asumir esa ira que sientes hacia otro y percatarse por uno mismo de lo que se siente bajo la piel del otro.
¿Y qué haréis con esta ira que sentís hacia vosotros mismos, y por qué habrías de sentirlo en la forma en que lo hacéis, activada, digamos, por un catalizador de naturaleza sorprendente, de naturaleza oculta, de naturaleza repetitiva? Podemos decir que si veis que ciertos tipos de catalizadores se repiten, podéis entenderlo como una de vuestras lecciones básicas, programadas por vosotros antes de que comenzara vuestra encarnación, con la esperanza de que durante la encarnación descubrierais el patrón y vierais dónde reside la ira, y qué tipo de catalizador la activa.
En este sentido, queridos amigos, usamos la palabra catalizador como aquel factor neutral que produce, digamos, una respuesta emocional dentro de vuestro ser. En este caso estamos debatiendo acerca de la ira, así que el catalizador podría ser cualquier cosa: podría ser el pinchazo de un neumático en la carretera, podría ser una palabra hiriente de otra persona que os critica, podría ser un miembro de la familia que repite ciertos comportamientos que empiezan, como diríais, a molestaros intensamente hasta irritaros. Y sin embargo, cuando examináis la verdadera causa de la ira que crece en vuestro interior, examinadla dentro del estado meditativo y veréis, si lo examináis con claridad, que la causa es vuestra incapacidad de aceptar alguna característica de vuestro propio ser que tiene su reflejo en otro. Este efecto de reflejo es lo que hace que la interacción con otros seres sea lo más importante dentro de vuestra ilusión, porque son otros seres los que reflejan hacia vosotros esas porciones de vosotros mismos que no aprobáis. En este caso, sería la ira. Tal vez podrías hacer un planteamiento como: “Bueno, tal y tal se comportaron de tal y tal manera y, ¿acaso no os enojaríais vosotros también?” La respuesta podría ser “Bueno, yo también me enojaría si estuviera tratando de aprender las lecciones de la compasión”.
Porque si miráis cualquier situación con el ojo de la compasión, del verdadero amor sincero, y os alejáis de ella observándola desde la distancia, veréis, si veis con claridad, que el Creador se experimenta a sí mismo a través de vosotros. Porque, ¿no es ésa la razón de la Creación? Dar al Creador una variedad de experiencias que no tendría sin vuestras elecciones de libre albedrío. Y así lo hacéis, en todo lo que hacéis, darle al Creador experiencias de mayor intensidad y variedad.
Así que cuando observáis desde la distancia y ves que el Creador se experimenta a sí mismo, desde el momento en que ya no os sentís sujetos a esa imagen y a esa experiencia, vosotros sentís amor, sentís compasión, sentís comprensión, sentís aceptación, y luego, os movéis de nuevo para poneros en el papel del que ha experimentado la ira y perdéis esa lejana perspectiva, perdéis el conocimiento del Creador experimentándose a sí mismo, y esto no es malo, queridos amigos—por eso vinisteis aquí, esto es lo que os ofrece esta ilusión. No os sintáis mal por tener lo que llamáis ira u otras distorsiones. Estos son los métodos por los cuales aprendéis aquello que deseáis aprender. Cuando experimentáis tal catalizador sabéis en vuestro corazón y en vuestra alma que estáis haciendo lo que vinisteis a hacer.
Ahora, queridos amigos, ¿qué vais a hacer con la ira, además de sentirla en el momento y luego sentir el remordimiento posterior? Recomendamos lo que aquellos que conocéis como Ra sugieren como un ejercicio de compensación, ejercicio en el que tomáis la ira que se ha esparcido sobre vosotros y ha pintado vuestras emociones con su propio color, y usarlo de manera que pueda dar como resultado la disminución de la ira y aumentar el amor por vosotros mismos y por toda la Creación que os rodea.
Aquellos de Ra han dicho que la naturaleza de la distorsión, en este caso la ira, es tal que para equilibrar la distorsión, primero tenéis que acentuarla. Esta es la forma hacerlo con todas las distorsiones, con todo aprendizaje, así que cuando sintáis ira, al final del día, en vuestra meditación (y recomendamos encarecidamente la meditación), volved a revivir la experiencia que os provocó ira al final de vuestro día y con este mismo propósito. Vedla tal y como se desarrolló. Sentid otra vez mentalmente esa ira, y luego aumentad la ira en lo que denominaríais proporciones descabelladas, de modo que se haga tremendamente poderosa dentro de vuestra mente mientras meditáis sobre ella. Y entonces, en la cima de su poder, sólo por un instante, imaginad lo opuesto, es decir, el amor que deseáis hacer surgir en esta encarnación. Una vez hayáis imaginado ese amor, descansad y observad cómo crece dentro de vuestra consciencia, cada vez más grande, dentro del panorama mental interior, hasta que iguala a la ferocidad de la ira que acabáis de crear.
Ahora observáis que tenéis dentro de vosotros dos medios por los cuales el Único Creador puede llegar a conocerse a sí mismo. Ahora aceptaros a vosotros mismos por tener ambos medios para que el Creador se conozca a sí mismo contenidos dentro de vuestro propio ser. Esta aceptación de vosotros mismos asentará esta lección cada vez más firmemente dentro de vosotros cada vez que uséis este proceso de compensación.
Este programa no es rápido ni fácil, queridos amigos, pero si no se equilibran vuestras distorsiones, si no se compensa vuestra ira en este caso, continuará durante el resto de vuestra encarnación, y el aprendizaje del amor llegará muy, muy lentamente. Vendrá eventualmente, pero no en el grado en que esperabais.
Si deseáis acelerar el aprendizaje y acumular amor dentro de vuestro ser, entonces utilizad los ejercicios de compensación para hacer eso mismo, ya que estos ejercicios son los que permiten a vuestros centros de energía, especialmente a los inferiores, y a veces a los centros de energía superiores, funcionar más eficazmente, y permitir que la energía inteligente o la luz, el prana del Único Creador de vuestro astro Sol, vuestro Logos, acceda a través de vuestros pies y chakras inferiores y se muevan sin obstáculos a través de todo el sistema de chakras o centros de energía. En última instancia, la meta de cada buscador es hacer que esta energía se mueva a través del rojo de la supervivencia y los impulsos sexuales, del naranja de la naturaleza emocional y las relaciones individuales, del amarillo de la participación del yo en el grupo, del verde de la energía universal del amor libremente ofrecido, al azul de la comunicación e inspiración libres, y del rayo índigo en el que se encuentra el Único Creador y la energía inteligente del Único Creador, y que puede descubrir el buscador que es capaz de eliminar los bloqueos de los centros de energía más bajos a través del proceso de su compensación.
Si estos bloqueos no se eliminan, la energía del Único Creador no puede progresar hacia arriba en lo que denomináis la elevación del kundalini. El bloqueo de esta energía causa varias dificultades dentro del complejo mente/cuerpo/espíritu del ser humano. Si estos bloqueos no se perciben a nivel mental y emocional por vuestro propio ser y se equilibran en la meditación, bien podría ser que estos bloqueos se transmitan de modo simbólico al complejo corporal de tal modo que el desarrollo de varias distorsiones que llamáis enfermedad comiencen a tener efecto dentro del cuerpo físico. La idea aquí es que si una enfermedad se hace presente en el cuerpo, la atención se centrará más plenamente en el cuerpo físico, y el enigma de por qué la enfermedad está ahí se resolverá eventualmente mediante la aplicación mental del análisis, la conjetura, la compensación y la integración.
Vuestros centros de energía, así equilibrados, en algún momento de vuestra encarnación quedarán libres para permitir que la energía del Único Creador se mueva más y más alto hasta que el centro de energía del rayo verde se active. Cuando este centro se activa, entonces la cosecha de esa entidad se acerca, para ello sólo es necesario clarificar los centros rojo, naranja y amarillo con objeto de llegar al centro de energía del rayo verde. Porque ésta es la vía positiva de la que hablamos, la capacidad de amar y servir a los demás más que a uno mismo, más que uno ama y sirve al yo, y somos conscientes de que cada uno dentro de este círculo de búsqueda es una entidad orientada positivamente tratando de mover las energías cada vez más alto en el sentido positivo. Luego, si eres un buscador valeroso, lleno de espíritu de aventura y deseando experimentar más catalizador, es posible moverse más y más alto dentro de los centros de energía, hasta que eventualmente el prana del Único Creador encuentre al infinito inteligente, la Estrella Polar, la Estrella del Norte que reside dentro del rayo índigo, y se hace posible experimentar plenamente la presencia del Creador Uno Infinito. Este es el gran objetivo de todos los que buscan esta perla de gran precio, diríamos.
En este momento, queridos amigos, dejamos abierta la posibilidad de preguntas para continuar con esta consulta en particular, si no hemos cubierto algún punto que desearíais que hagamos. ¿Hay alguna pregunta de continuación en este momento?
Gary
Q’uo, sobre el tema de la ira específicamente, Ra lo llama una “energía aleatoria” un par de veces. En 46.9, dicen: “Energía aleatoria y no dirigida” y “energía aleatoria de la ira”. ¿Sabes por qué asociarían ese adjetivo con la ira?
Q'uo
Soy Q’uo y estoy al tanto de tu consulta, hermano. La emoción de la ira es de tal intensidad que es muy fácil para la entidad que la experimenta el perder el control, digamos, no poder dominar la ira, no ser capaz de encauzarla, de domarla, sino que queda a su merced. En este sentido, es aleatorio en su efecto sobre el complejo mente/cuerpo/espíritu, ya que la mayoría de las emociones que encontrarás en tu proceso de equilibrio no serán, digamos, tan violentas en su expresión dentro de la mente y de las emociones del buscador.
¿Hay alguna otra pregunta, hermano?
Gary
No, gracias, Q’uo.
Q'uo
Soy Q’uo y te damos las gracias, hermano. ¿Hay alguna otra consulta de continuación a esta pregunta en este momento?
[ninguna respuesta]
Q'uo
Soy Q’uo. ¿Hay alguna otra consulta en este momento?
Gary
B escribe: “Mi marido experimenta temblores involuntarios mientras medita. Aunque parece que no es habitual, sabemos que esto le sucede a otros y somos conscientes que ciertas religiones y culturas también tienen experiencias así, como los cuáqueros, los shakers, bosquimanos y otras culturas chamánicas. Nos parece una especie de “vía rápida” para el desarrollo espiritual y la curación. Por favor, ¿puede hablarnos sobre este tipo particular de meditación y su propósito? Además, si mi marido se siente tan inclinado y capaz, enseñar esta habilidad de meditar agitándose, ¿podría ser un servicio útil para los demás en este tiempo de transición?”
Q'uo
Soy Q’uo y estoy al tanto de tu consulta, hermano. Esta capacidad para la, digamos, estimulación artificial de las energías del kundalini para elevarse del rayo rojo hacia arriba, a menudo se logra mediante ciertas técnicas de respiración y ejercicio que pueden, en cierto sentido comenzar este proceso que toda encarnación procura lograr. Sin embargo, vemos que a menudo se producen dificultades dentro de ciertas entidades, que no son conscientes de que lo que están haciendo con ciertos ejercicios de respiración es despertar el kundalini para que comience su proceso sin, digamos, la apropiada instrucción o búsqueda dentro de los centros energéticos inferiores en este proceso, pues es uno de gran poder. Se trata de acercarse, si se hace de manera consciente y cuidadosa, con respeto y con un programa que, digamos, se desarrolla con una planificación diaria que busca despertar suavemente esta energía durmiente, pues es aquella que contiene todo el poder del Creador Uno Infinito. Recomendamos cautela en su ejercicio. Recomendamos la utilización de aquellos que enseñan prácticas específicas para despertar esta energía. No es sensato llevarlo a cabo sin la debida cautela.
¿Hay alguna otra pregunta, hermano?
Gary
Sí, hay una pregunta de J, que se pregunta acerca de la intoxicación por alcohol y drogas, y se pregunta qué efecto tiene eso en nuestra experiencia espiritual. Modificaré esta pregunta para excluir de esas categorías las sustancias psicoactivas que pueden producir una genuina comprensión de uno mismo y preguntar a Q’uo sobre otros estupefacientes, si puede decirse algo a grandes rasgos acerca de su efecto en nuestro viaje espiritual.
Q'uo
Soy Q’uo y estoy al tanto de tu consulta, hermano. El efecto sobre el buscador espiritual de estos diversos estupefacientes es, para ser honesto, de lo más variado. No hay una regla general, digamos, o tratamiento que sirva para todas las entidades. Para algunos, lo que del vino se dice in vino veritas, para ellos eso es verdad. Para algunas entidades, la capacidad de liberarse de las preocupaciones del día y ponerse, digamos, colocado o ebrio, es una manera de encontrar el yo interior durante un momento o dos y permitir que este niño interior juegue. Para otros, que tienen personalidades diferentes, es difícil emprender tales experiencias sin sufrir los efectos más deletéreos de la naturaleza adictiva que tales sustancias tienen para ciertas personalidades. En este caso, el aprendizaje y el potencial se encuentran en el anverso de esa experiencia, es decir, descubrir una razón para no usar tales sustancias. Por lo tanto, no podemos daros una regla general que sea aplicable a todas las entidades.
¿Hay una pregunta final, hermano?
Gary
Antes de preguntar, miraré al grupo para ver si alguien tiene alguna.
[ninguna respuesta]
Gary
Consulta final. Bien, la pregunta para mí acerca de ese tema—se me ocurrió mientras escuchaba, que aunque hay ciertas religiones que aceptan los estupefacientes, y una vez más excluyo las substancias psicoactivas, no estoy al tanto de ninguna enseñanza para el camino del adepto que incluya el uso de tales substancias. En la medida en que eso sea correcto, ¿por qué el camino del adepto buscaría excluir los estupefacientes?
Q'uo
Soy Q’uo y estoy al tanto de tu consulta, hermano. El camino del adepto es el camino de quien busca ver y experimentar con claridad ese camino hacia la unión con el Único Creador. En este viaje de unión, el adepto tiene muchas oportunidades de servir a los demás. Para que estas oportunidades ser más eficaces, las necesidades deben observarse con claridad de vista y de corazón, y así también las emociones.
El uso de estupefacientes es tal que mientras se utilizan la visión se enturbia, digamos. No decimos que esto sea así para todos y cada uno de los buscadores. En este caso, lo ofrecemos como una regla potencialmente general de que el adepto sería aquel que se ha liberado de esas cualidades del mundo exterior que menoscaban su camino de búsqueda hacia la unión.
Muchas experiencias en el mundo exterior, como lo llamaríais, o como las hemos llamado, a veces pueden parecer que son muy útiles e incluso proporcionar catalizador de una naturaleza útil. Pero conforme el buscador de la verdad, que llamamos adepto, avanza más y más a lo largo de su camino, descubrirá que esas cualidades del mundo exterior que en un tiempo eran experiencias felices, ya no tienen atractivo. El mundo y todos sus señuelos caen, y sólo el mundo interior es el que le importa a tal buscador, porque sólo en la búsqueda de la verdad por la meditación, por la contemplación, por la oración, por el ayuno, por ofrecerse por completo a la voluntad del Creador, puede el verdadero buscador alcanzar este objetivo de unión con el Único Creador.
Queridos amigos, os agradecemos el habernos invitado una vez más a vuestro círculo de búsqueda. Ha sido un placer, un honor y un tesoro estar con vosotros. Puede que no seáis capaces de contemplar el amor y la luz que creáis cuando os reunís, porque vuestros ojos aún no se han abierto para ello, pero vemos este amor y luz. Lo vemos como una torre de poder que brilla refulgente, que alcanza los cielos, llamando a todos los que buscan la luz y sirven a la luz, para alegrarse en su presencia, y os agradecemos nuevamente por invitarnos en este día. Se nos conoce como aquellos de Q’uo. Os dejamos como os encontramos, en el amor y en la luz. Adonai, vasu borragus.