En 94.12, Ra dice: “A medida que la entidad aumenta en experiencia, escogerá cada vez más interpretaciones positivas del catalizador si está en el camino del servicio a los demás”.
Nuestra pregunta es: A medida que la entidad positiva avanza a lo largo de este camino, eligiendo cada vez más interpretaciones positivas del catalizador, ¿hay riesgo de que esta orientación pueda conducir a una ingenuidad sin fundamento o a una incapacidad para reconocer situaciones que merecen temor, preocupación y cautela?
La entidad positiva, ¿puede abrirse completamente al catalizador desde la perspectiva de la rendición, la no resistencia, la aceptación y la confianza de que todo está bien, y aun así proceder con sensatez?
(Canaliza Jim)
Q’uo
Soy Q’uo, y os saludamos a todos esta tarde en el amor y en la luz. Nos complace mucho y es un privilegio el haber sido invitados a unirnos hoy a vuestro grupo. Pediríamos, como siempre, un pequeño favor, y es que toméis aquellas palabras que vamos a ofreceros que os sean útiles y las utilicéis como queráis, dejando atrás cualesquiera que no sean útiles sin pensarlo ni un segundo. Haciéndolo así, entonces nos sentiremos capaces de departir libremente con vosotros, ya que como hemos dicho en otras ocasiones, no somos autoridades en última instancia, sino que somos vuestros hermanos y hermanas que han caminado quizás un poco más lejos en el mismo camino por el que ahora viajáis, pues todos los caminos son uno, queridos amigos, todos los caminos conducen al Único Creador, y sin embargo, nadie necesita moverse ni un solo paso, porque el Creador está con vosotros en todo momento. A través de este camino buscamos llegar a ser uno en todos los sentidos con el Único Creador, como vosotros lo hacéis.
Al recorrer este camino y percibir las diversas formas en las que podéis experimentar el catalizador que se os proporciona en vuestras actividades diarias, comenzáis a elegir más y más en el sentido positivo, y comprobáis que hay cada vez más de naturaleza positiva en el catalizador que os sale al encuentro, de modo que el miedo disminuye en vuestro corazón, en vuestra mente, en vuestro propio ser, porque entendéis lo constructivo que ha sido en otras ocasiones. ¿Cabe la posibilidad de que os volváis imprudentes—de que podrías volveros, digamos, inconscientes ante posibles eventualidades? ¿Podría darse un catalizador, con el que todavía no os hayáis encontrado, y que pudiera causar dificultades por no acompasarse a vuestra perspectiva positiva? Creemos que básicamente esto es lo que reside en vuestra pregunta y de lo que intentaremos hablaros esta tarde, ya que es nuestro gran honor y privilegio intentarlo.
Cada uno de vosotros vive ahora en una encarnación que forma parte de una gran línea o linaje de experiencias encarnadas, y que os han llevado hasta este punto en vuestra propia evolución de mente, cuerpo y espíritu. Antes de esta encarnación, tu, como buscador que aspira a la unidad, al amor y a la luz, te has planteado la posibilidad de aprender aquellas lecciones que son de la mayor importancia para ti en tu capacidad de servir a los demás, de polarizar en un sentido positivo hacia la búsqueda del Único Creador, y para poder expresar la unidad de toda la creación que vive dentro y fuera de ti.
Estas lecciones conllevan una responsabilidad especial, queridos amigos. Esta responsabilidad subyace en vuestra mente subconsciente, de modo que a medida que experimentáis un evento tras otro—pensamientos, palabras y obras conjuntamente—existe la posibilidad de que la mente subconsciente os dirija un catalizador de un cierto matiz, digamos, que ejerza una cierta atracción por vosotros y que os predisponga de algún modo a procesar ese catalizador.
Por supuesto, vuestra mente consciente, habiéndose puesto en marcha por la mente subconsciente, trabaja a su manera para transformar mágicamente lo que viene antes de que tenga lugar. Vosotros observáis vuestro catalizador diario de manera consciente, y podéis ignorarlo, podéis observarlo como habíais esperado verlo antes de encarnar, podéis verlo totalmente de otra manera. Porque de hecho, cuando estáis encarnados, lo que habéis determinado aprender antes de la encarnación se confronta cara a cara con el libre albedrío de la mente consciente.
En vuestra pregunta, estáis dando por supuesto que la mente consciente, a través de muchos años de procesar el catalizador, ha desarrollado cierta inclinación que le es propia, que puede estar o no en congruencia con la inclinación de la mente subconsciente. En la mayoría de los casos, para las entidades orientadas positivamente, viendo las connotaciones positivas del catalizador, estas inclinaciones también serán muy probablemente de naturaleza positiva, para así convertirse en alguien que percibe lo esencial de la experiencia, y no se deja engañar, digamos, por la apariencia exterior de lo que viene antes de que tenga lugar. De hecho, dentro de vuestra ilusión de tercera densidad, hay amor en cada momento, en cada evento, en cada entidad, y es vuestra tarea, vuestro reto, vuestra alegría el encontrar allí ese amor. Puede ser más o menos difícil, dependiendo de las elecciones realizadas con anterioridad y del catalizador actual, y de la percepción que de ello os permitáis tener.
En este momento, vamos a transferir este contacto al conocido como Steve. Somos aquellos de Q’uo.
(Canaliza Steve)
Soy Q’uo, y estoy con este instrumento. Comenzaremos nuestra comunicación a través de este instrumento sugiriendo que ahora estamos proporcionando un catalizador a este instrumento, y este instrumento se ha abierto a nosotros en la seguridad de que su intención es distorsionar lo menos posible este catalizador, para que el catalizador pueda entregarse a los demás en este círculo de búsqueda de la manera más clara posible, dadas las limitaciones de la capacidad de este instrumento para recibir el lenguaje en el que se ofrece la comunicación, y dada la capacidad del grupo para escuchar y aceptar el catalizador que hemos de ofrecer. Las palabras que pronunciamos serán las que serán, pero hay muchos oídos diferentes aquí para escuchar las palabras que tenemos que ofrecer, y no en todos los casos el catalizador resultará idéntico. Y así, os sugerimos que cuando se trate de la tarea de asimilar y procesar el catalizador, no es tanto una cuestión acerca de de lo que se piensa que es el propio catalizador objetivamente hablando, sino de cómo funciona ese catalizador en relación con vuestra capacidad para recibirlo, para estimular vuestra energía para aceptarlo y vuestro poder de respuesta. Las respuestas que se suscitarán dentro de este grupo serán muchas y diversas, y podrán serlo así incluso cuando todas tiendan hacia una recepción positiva.
Y así, el punto que nos gustaría comenzar a tratar es que el catalizador es de tal condición que es como si tuviera dos caras, porque visto superficialmente y desde el exterior, el catalizador es simplemente lo que os sucede. Mientras que visto desde el interior, el catalizador hace la pregunta de cómo recibís lo que os llega. Ahora bien, es cierto que vuestra capacidad de recepción tiende a ejercer una especie de atracción o influjo magnético en relación con el catalizador en general, de modo que a veces puede decirse que lo que os sucede es lo que habéis atraído a vosotros mismos. Pero también hay una gran cantidad de catalizador en relación a los eventos más importantes de vuestro mundo en estos momentos, de aquello que le sucede a todo vuestro complejo de energía social, y que es de tan amplio alcance que no es concebible que cada miembro del complejo de energía social hubiese atraído este catalizador exclusivamente para sí.
Así que, en el día a día, cada cual recibe un suministro de catalizador que es de naturaleza altamente personal, y asimismo también se le ofrece catalizador de una naturaleza que podríamos denominar más colectiva. Las diferentes capas del catalizador, como podríamos llamarlas, sugieren una adecuación en la respuesta que las diferencia. Hemos dicho que entre lo público y lo personal se puede distinguir un efecto de superposición, y añadiríamos que este efecto de superposición es realmente muy profuso, de modo que, en efecto, tenéis muchas, muchas capas de catalizador, unas sobre otras, mezcladas en relaciones complejas más allá de nuestra capacidad de describirlas y generalmente más allá de vuestra capacidad de discernirlas. Pero es útil advertir que el catalizador que tiene una naturaleza más personal, el que os incita de un modo muy particular, está sujeto a vuestra respuesta individual en un sentido altamente personal. Con respecto a este catalizador, está ciertamente en vuestra mano elegir cómo interpretar ese catalizador, y subsecuentemente qué respuesta darle, y cómo proceder en relación a los eventos que marcan los puntos de inflexión decisivos en vuestra vida.
En lo que se refiere a aquel catalizador que es de un tipo más colectivo, hay un punto que sugeriríamos que estaría bien que tuvierais en cuenta. Y es que hay un aspecto de vuestro propósito al encarnar aquí que no es tan solo para el crecimiento personal. Sugeriríamos que el crecimiento y desarrollo personal es siempre un componente de vuestra existencia encarnada, y nunca debe ser olvidado. Pero vosotros también os habéis encarnado para servir—servir a los demás—y para ser como un faro de luz, tal como sois capaces de serlo. ¿Qué sucede cuando los otros a los que buscáis servir están a veces en buena situación, y otras veces en una situación en la que podéis percibir trastornos, en la que podéis percibir dolor, en la que podéis percibir tristeza? Estas son situaciones que os incitan a servir y para las que conviene sintonizar con las circunstancias que así lo requieran. Por lo tanto, si alguien sufre dolor, haréis bien al ofrecerle alivio. Si alguien se halla en un estado de tristeza, haréis bien al ofrecerle consuelo. Si alguien está en una situación de confusión, haréis bien al ofrecerle una explicación tan clara como pueda ser bien aceptada por el que requiere vuestro servicio.
Ahora bien, además de tratar de servir a los demás de forma individual, todos vosotros os enfrentáis a un complejo social tan complicado que a menudo podría parecer que una sola modalidad de servicio sería inútil, y puede resultar muy confuso intentar discernir dónde poder ofrecer un servicio efectivo. Cuando el complejo social se halla en un estado de conmoción, en un estado de confusión y en un estado en el que muchos de los buscadores como vosotros puedan sentirse seriamente desplazados, haríais bien en ofrecer un punto de vista que fuese positivo, que fuese edificante, que fuese alentador, al tiempo que reconozca las dificultades que dominan vuestra densidad de experiencia en estos momentos. Esta no es tarea fácil, queridos amigos, y las circunstancias en las que os podéis encontrar pueden ser tales que desafíen vuestra propia positividad de maneras que a vosotros os resulte algo lento el identificarlas. La naturaleza del catalizador es tal que, en términos generales, es bastante ambigua con respecto a lo que pueda mencionarse como intrínseco del mismo. Hemos sugerido que es posible responder al catalizador de una manera que refleje una polarización negativa y es posible responder al catalizador de una manera que refleje una polarización positiva.
Ahora bien, no hay un patrón sobre el que podáis poner todo tipo de catalizador y os de una hoja de ruta de lo que es negativo y de lo que es positivo. En general, si sentís que en vuestra respuesta sois capaces de experimentar y expresar el corazón abierto, creemos que estáis sobre un terreno bastante seguro. Pero el corazón abierto es un fenómeno de lo más esquivo, porque podéis expresar esperanza, alegría y amor, y sin embargo descubrir que las mismas cualidades que habéis abrazado conscientemente y que habéis tratado de expresar son recibidas de tal modo que o bien estas cualidades son rechazadas, o bien es rechazada vuestra expresión personal de ellas. Y ahora, ¿qué hacéis, queridos amigos? ¿Cómo respondéis a este rechazo? ¿Respondéis rechazando el rechazo, o respondéis aceptando aún más el catalizador que tiene que ofreceros aquel a quien os dedicáis? Este puede resultar un terreno complicado, queridos amigos, y haríais bien en conocer algo de vosotros mismos mientras viajáis por estos caminos tortuosos. Por ejemplo, pudiera ser que encontréis un límite a vuestra capacidad para expresar y mantener la positividad en una interrelación, y bajo estas circunstancias sería correcto retirarse educadamente. Pudiera ser que os sintáis a la altura de la tarea de asumir el papel de aquel que absorbe la negatividad ofrecida por otro y transmutar esa negatividad a un efecto positivo, de modo que vuestra respuesta no parezca ser un rechazo, sino que más bien parezca ser la aceptación de aquello que el otro ha sentido la necesidad de expresar. En el caso de aquel otro con quien tengáis básicamente una relación amorosa, este proceso puede demostrarse muy útil para ambas partes. En el caso de aquel otro con el que no hay una relación basada en la confianza, este proceso puede ser de suyo desconcertante. Y así, no vamos a negar que hay ocasiones donde lo más prudente es mantener el propio criterio. No vamos a negar que hay casos en los que lo más prudente es ocuparse de las propias energías, de modo que puedan mantenerse en equilibrio y en reserva para aquellas ocasiones en las que poder emplearlas de tal modo que os cercioréis lo mejor posible de que el resultado sea prometedor.
Cuando observáis a vuestro complejo social en estos momentos, veréis que hay tantas configuraciones diferentes como distintas combinaciones de influencias positivas y negativas que podáis imaginar, y no os resultará posible clasificar cual es cual de un modo caracterizado en cada ocasión. Habrá momentos en los que os sentiréis fuera de sí hasta el punto de no poder centraros, y podéis veros en unas circunstancias en las que la energía que estáis expresando no es la que quisierais que fuese. Esto, también es relevante para vosotros a nivel personal, y cuando tengáis tal experiencia, haríais bien en retiraros a vuestro lugar seguro donde podáis, en meditación, en contemplación, en la oración, analizar y trabajar con estas energías a fin de descubrir lo que ha catalizado esa parte de vuestro ser con un resultado del que podéis elegir decidir que no es el que hubierais querido que fuera, y que pueda establecer un programa de trabajo del yo sobre sí mismo donde podáis gradualmente, a través de un lento proceso de descubrimiento, encontrar vuestro camino hacia una relación más sostenible con la positividad general de la que hace mucho tiempo habéis hecho el objeto de vuestro futuro desarrollo.
Cuando os sintáis estables y despejados, y con la suficiente entereza como para disponer de una energía que brindar al mundo de una manera equilibrada y clara, entonces podréis marchar decididamente entre las energías de vuestro complejo social con ese obsequio tan precioso que tenéis que ofrecer, que es el don de vuestro corazón abierto, y al ofrecer un corazón abierto, estáis aceptando también lo que os venga de vuelta. Como decimos, esta energía que os retornará tendrá matices muy distintos y complejos, y habrá componendas de energías involucradas. Será casi como si estas energías hubieran sido diseñadas específicamente para deshacerse de vosotros, y quisieran deshacerse de vosotros una y otra vez. No obstante, el buscador valeroso, habiendo sido rechazado, no lo tomará como un rechazo, ni como algo a combatir, ni como algo que debe ser destruido, sino como un regalo, como la promesa de una oportunidad para alcanzar el nivel y la dimensión de la aceptación, para alcanzar el nivel y la dimensión de la positividad, para alcanzar el nivel y la dimensión de amor aún no descubierto dentro de uno mismo. Cuando se produce este descubrimiento, y cuando los frutos de este descubrimiento han venido a través de la lenta labor de meditación, de la sensibilización y, sencillamente, del amor asentado en las profundidades de vuestro ser, entonces descubriréis que tenéis que ofrecer un regalo aún mayor y más profundo a un mundo muy, muy necesitado de ello.
Queridos amigos, hemos empleado lo que para vosotros serían muchos largos años tratando de servir a vuestras gentes. Nos hemos entristecido con vuestras gentes. Nos hemos alegrado con vuestras gentes, y hemos visto malograrse, uno tras otro, nuestros intentos de servir, y sin embargo, incluso en medio de las ruinas de un proyecto que pensábamos que estaba bien hecho, hemos distinguido rayos de esperanza en formas que han encontrado expresión y que no anticipábamos—que no podríamos haberlas anticipado; Y así, hemos crecido, hemos aprendido, incluso de aquellos intentos que parecen habérsenos echado en cara como absolutos fracasos, y que nos han hecho sentir sumamente ingenuos.
Queridos amigos, para nosotros, criticaros por ser ingenuos sería como si la sartén le dijera al cazo: ¡apártate, que me tiznas!, porque según nuestra experiencia, nuestra ingenuidad resuena hasta en los rincones más lejanos del universo y, una y otra vez, nos hemos sentido sumamente incompetentes en nuestros intentos de servir. Y sin embargo, y a pesar de todo como decimos, hay rayos de esperanza, hay chispas de alegría, y hay momentos de expresión creativa que han influido en lo más profundo de nuestro ser a la par que nos alegramos por las nuevas formas en que la positividad logra encontrar expresión, muy a menudo en los momentos de mayor oscuridad.
Ni que decir tiene, queridos amigos, que no debéis ser ingenuos, como tampoco vamos a deciros que debáis dar por hecho que vuestras expresiones de positividad encuentren inmediata resonancia en vuestro entorno. Lo que podemos deciros es que vuestra intención de servir os servirá bien. Habréis de examinar esta intención una y otra vez, porque muy a menudo no dará el resultado que esperabais, y en esas ocasiones, no sólo tendréis que perdonar al mundo por tal decepción, sino que también necesitaréis examinar la claridad y pureza de vuestra propia intención de servir.
Queridos amigos, ese proceso no termina nunca. Continúa siendo el proceso en el que nosotros mismos nos hallamos intensamente atareados. Es el camino de la positividad, queridos amigos, y a él os encomiamos. Os ofrecemos este catalizador del mismo modo que vuestra llamada supone para nosotros un ofrecimiento de catalizador, y os damos las gracias, queridos amigos, y deseamos que Dios os acompañe a lo largo de vuestro camino. Somos aquellos de Q’uo, y en este momento quisiéramos volver al conocido como Jim para preguntar si tenéis más consultas en mente. Adonai, queridos amigos, Adonai.
(Canaliza Jim)
Soy Q’uo, y estoy de nuevo con este instrumento. En este momento quisiéramos preguntar si hay más consultas de las que pudiéramos hablar.
Gary
Q’uo, cuando entre dos personas se produce una transferencia de energía sexual, ¿cuál es el itinerario que recorre la energía? Por itinerario quiero decir que si la energía transferida entre las dos personas pudiera verse, ¿cuál sería el camino que recorrería entre ambas?
Q'uo
Soy Q’uo, y estoy al tanto de tu consulta, hermano. Este camino reproduce el itinerario utilizado por la energía inteligente del Creador, también conocida como prana, que se mueve primero a través del centro de energía del rayo rojo, hacia arriba sucesivamente, hasta el rayo violeta.
¿Hay alguna otra pregunta, hermano?
Gary
Sí, por favor, si pudiéramos detallarla. En la transferencia de energía, mencionasteis que la energía se mueve como lo hace el prana, de rojo hasta el violeta, en serie. ¿Cómo se mueve entre las propias personas?
Q'uo
Soy Q’uo, y estoy al tanto de tu consulta, hermano. Cuando cada entidad, o una entidad si ese fuera el caso, tiene la experiencia del orgasmo, entonces las energías de cada uno se mueven hacia el otro, comenzando con el rayo rojo, de modo que hay un entrecruzamiento de energías en el rayo rojo, moviéndose luego hacia arriba a través de cada rayo sucesivamente, hasta el centro de energía del rayo violeta. ¿Hay alguna otra pregunta, hermano?
Gary
En el caso de que, como mencionó Ra, el rayo verde estuviera activado en ambas entidades, entonces uno de ellos puede avanzar más allá del rayo verde. Entonces, supongamos que tenemos una entidad activada por el rayo azul y una entidad activada por el rayo verde; La entidad activada por el rayo azul, ¿añade entonces una transferencia adicional de energía del rayo azul a la entidad del rayo verde durante una transferencia de energía sexual?
Q'uo
Soy Q’uo, y esto es correcto, hermano. ¿Podemos expresarlo de alguna otra manera?
Gary
Sobre esa pregunta no, muchas gracias.
Q'uo
Soy Q’uo, y te damos las gracias, hermano.
¿Hay alguna otra consulta en estos momentos?
Steve
Sí, Q’uo, tengo una pregunta. Cuando uno se topa con un saludo especialmente negativo proveniente de otro, ¿pueden decirnos qué opciones hay para responder positivamente a esto?
Q'uo
Soy Q’uo, y estoy al tanto de tu consulta, hermano.
Para la entidad orientada positivamente, es de suma importancia comprender que la entidad que parece ser un adversario, verdaderamente no es tal. Esta entidad es también el otro yo de la entidad positiva, es también el Creador, lo es tanto como la entidad positiva. Así pues, la entidad orientada positivamente que recibe un saludo psíquico, o un ataque psíquico, como lo denominas, es capaz de expresar mejor su propia positividad al entrar en el estado meditativo, e intentar darle significado enfocando la atención hacia el interior del yo, en la experiencia tranquila y sosegada del Único Creador que habita dentro, y desde este estado, y a través del centro de energía del corazón, enviar amor y luz a la entidad que saluda a la entidad positiva.
Este amor y esta luz son sinceros, en el sentido de que no se envían con el propósito de hacer que la entidad negativa cese en su saludo, o bien que deje en paz a la entidad positiva, digamos. Se envía porque la entidad positivamente orientada siente verdadero amor y luz por este otro yo que es el Creador, que ha viajado por otro camino que el que ha elegido la propia entidad positiva. Por lo tanto, esto es lo primero que la entidad positiva debe lograr.
Además, la entidad orientada positivamente imaginará en su mente la forma que tiene el saludo. Lo examinará con cuidado y enviará el mismo amor y luz a este saludo, del mismo modo que se envió a la entidad orientada negativamente.
Además, la entidad orientada positivamente enviará este amor y luz hacia sí misma, a modo de barrera de luz sobre sí misma, girando en espiral en sentido horario, como lo hace la línea de luz de la Creación que se dirige hacia arriba en espiral.
Para completar el proceso, la entidad positivamente orientada enviará este amor y luz al Creador que existe en todo lo que hay en todo tiempo y lugar.
Esta es la forma por la cual la entidad orientada positivamente expresará la mayor positividad en respuesta al ofrecimiento de servicio a la entidad positiva por parte de una entidad orientada negativamente.
¿Hay alguna otra pregunta, hermano?
Steve
No, gracias, está muy bien. Lo estudiaré.
Q'uo
Somos Q’uo, y te damos las gracias, hermano, por tu consulta.
¿Hay alguna otra consulta en estos momentos?
F
Me gustaría continuar con eso. El mismo procedimiento… ¿sería eficaz para ayudar al complejo social, que tanta negatividad tiene? Cada persona que está orientada de forma positiva, ¿podría utilizar ese mismo procedimiento para ayudar a aliviar algo de la negatividad en el complejo social?
Q'uo
Soy Q’uo, y estoy al tanto de tu consulta, hermana. Esto, de hecho, es así. Hay muchas, muchas entidades repartidas por la superficie del planeta en esta época que hacen precisamente esto, es decir, participar en el proceso de sanación del propio planeta y de sus diversas culturas, o gentes, dependiendo de la elección de la entidad que hace el envío. Las entidades que, en estado meditativo, son capaces de retener una imagen en su mente durante una serie de minutos, digamos, pueden usar esta habilidad para focalizar su concentración, para enviar amor y luz a cualquier lugar, persona, grupo o situación sobre la superficie del planeta. De este modo, se proporciona, por así decirlo, ayuda de carácter general de naturaleza invisible que, sin embargo, es percibida por los complejos mente/cuerpo/espíritu de aquellas entidades que reciben tales envíos de amor y luz.
También hay entidades en la Confederación de Planetas al Servicio del Infinito Creador que no hacen sino enviar este amor y luz a este planeta, así como a muchos otros. Envían amor y luz a aquellas áreas del universo que experimentan dificultades y no son capaces de resolver estas dificultades con su propio esfuerzo, y necesitan el apoyo de aquellos que evocan sus propias experiencias cuando estaban en el mismo nivel de evolución, y está en su mano el modo de ofrecer ese amor y luz a aquellos que lo necesitan.
¿Hay alguna otra pregunta, hermana?
F
Las cosas tienen un aspecto muy negativo pero, el trabajo que están haciendo los que están aquí en el planeta y los de la Confederación, ¿están surtiendo efecto?
Q'uo
Soy Q’uo, y estoy al tanto de tu consulta, hermana. Desde luego vuestro planeta parece orientado muy negativamente en muchos aspectos. Sin embargo, esta es una percepción distorsionada de algún modo, porque son las acciones y las entidades y grupos negativamente orientados los que llaman la atención, los que arman más bullicio, digamos. Así, las acciones orientadas negativamente se hacen notar con más facilidad y se manifiestan en vuestro planeta en estos momentos de una manera tal que puede verse como un último esfuerzo para controlar las energías positivamente orientadas que hay sobre este planeta y que son, en realidad, mucho mayores que las energías orientadas negativamente, tanto cualitativa como cuantitativamente.
La cosecha de vuestras almas, como podría denominarse, ha estado sucediendo durante varios años en vuestro planeta. Los portales de ascensión están circundando vuestro planeta, al igual que un entramado de vórtices que reciben la energía inteligente del Único Creador en forma de rayos vivificantes de vuestro astro solar y son capaces de atraer a las almas que se mueven a través del proceso que llamáis morir hacia dentro de estos portales de ascensión, produciendo así una corriente de luz suave y constante desde la Tierra hasta este entramado de energías, formando una red de luz sobre vuestro planeta que se hace cada vez más brillante, no sólo con las energías de aquellos que se mueven a través del proceso de la muerte y de la cosecha, sino también manifestando las acciones orientadas positivamente, los esfuerzos y las intenciones de tantos en vuestro planeta que están trabajando para ayudar a la cosecha que está, digamos, ganando en impulso y velocidad.
Tenemos la esperanza de que nuestros esfuerzos por proveer tal servicio puedan acelerar este proceso durante un período de vuestro tiempo, dependiendo de las elecciones de las personas y grupos sobre vuestro planeta, y que eventualmente pueda ofrecerse a todas las entidades sobre la superficie del planeta.
¿Hay alguna otra pregunta, hermana?
F
No, muchas gracias.
Q'uo
Soy Q’uo, y te damos las gracias, hermana.
¿Hay alguna consulta para terminar en estos momentos?
Gary
Q’uo, Ra dice en #73.22: “La transferencia de energía sexual tiene lugar a un nivel que no es mágico, por todas aquellas entidades que vibran desde la activación del rayo verde. Es posible, como en el caso de este instrumento, que se dedica al servicio del Creador Infinito, refinar todavía más esta transferencia de energía. Cuando el otro yo también se consagra a sí mismo al servicio del Creador Infinito, la transferencia se multiplica por dos y la cantidad de energía transferida depende únicamente de la cantidad de energía sexual polarizada, creada y liberada.”
Entonces, mi pregunta es: ¿Podéis ayudarnos a entender por qué al consagrar la transferencia al Creador Uno Infinito, se duplica?
Q'uo
Soy Q’uo, y estoy al tanto de tu consulta, hermano. Cuando entidades de orientación positiva buscan combinar sus energías de una manera que rinde honor y gloria al Único Creador, están compartiendo estas energías no con una figura inmaterial, en algún lugar distante sobre una nube, sino que comparten estas energías con cada entidad de esta superficie planetaria, y, de hecho, más allá también. Porque el Creador existe en todos y cada uno sobre vuestro planeta.
Esta entrega al servicio del amor, de la luz y del poder del Único Creador recurre a las energías dentro de cada entidad que participan en la transferencia de energía sexual, de tal manera que a estas energías se las requiere de un modo que magnifica lo que podría verse como lo teóricamente factible o como un esfuerzo apreciable, y las multiplica de una manera que aumentan su dinamismo, su brillo y su poder, de modo que hay un efecto multiplicador.
Entonces, cada una de las dos entidades que participan en esta transferencia de energía sexual ofrece lo que tiene para darlo en esta transferencia, y dado que cada entidad ofrece las energías al Único Creador como principio y fin últimos de la experiencia, entonces las energías se duplican porque dos entidades han dado lo que tienen para ofrecerlo al Uno.
¿Hay una continuación breve, hermano?
Gary
Gracias por la oportunidad, la hay. Brevemente, ¿cuál es el mecanismo de esta dedicación? Es decir, ¿cómo se realiza esta dedicación? ¿Es una declaración verbal? ¿Es una intención mental? Le agradecería mucho, Q’uo, si pudiera aclararlo.
Q'uo
Soy Q’uo, y te damos las gracias, hermano, por tus preguntas. Sí, de hecho, hay una declaración mental formal, o cada entidad puede haber propuesto dedicar específicamente las energías compartidas entre ellos al Único Creador. Aquellos que se dedican a esta práctica de forma regular suelen utilizar una serie de palabras rituales, o quizás gestos, que formalizan este ofrecimiento. La dedicación es eficiente en proporción directa a la sinceridad profesada por aquellas entidades que consagran al Uno sus intercambios de energía.
Se nos conoce como aquellos de Q’uo. Os damos las gracias una vez más, queridos amigos, desde lo más hondo de nuestro corazón de corazones por habernos invitado hoy a este servicio, porque nos sentimos muy honrados de estar aquí, de poder daros nuestro mensaje, de cualesquier modo que podamos ser útiles. Vemos la luz que habéis creado con vuestra búsqueda. Nos sumergimos en esa luz, y comprobamos que ha atraído a un gran coro celestial que reconoce el carácter devocional del proceso de búsqueda aquí manifestado. Os dejamos en este momento como os hemos encontrado, en el amor y la luz del Creador Uno Infinito. Se nos conoce como aquellos de Q’uo. Adonai, Adonai, vasu borragus.