Transcripciones

11 de diciembre de 1982

Meditación del Sábado

Hatonn: Mis amigos, ustedes existen dentro de un mundo de ilusión, una escuela en la cual hay muchas lecciones que aprender, a menudo requiriendo de la entidad individual muchas vidas en las cuales lograr esta tarea. Así es como debe ser, porque es el deseo del Creador que cada uno de Sus hijos experimente la totalidad, la plenitud de la creación. Actualmente existen dentro de lo que se describe como la tercera densidad, y están en su mayor parte ocupando el terreno intermedio entre dos selecciones de polarización, la del servicio a uno mismo y la del servicio a los demás.

26 de septiembre de 1982

Meditación del Domingo

Hatonn: Amigos míos, nos corresponde llamar su atención en este momento sobre la gran cantidad de excesos implicados en las formas aceptadas por sus pueblos. Más específicamente, el exceso de provisiones, el exceso de cortesía interpersonal y el exceso de hipocresía espiritual. ¿Cuánto necesitan, amigos míos, para darse esa cosa diáfana, informe e incipiente llamada felicidad? ¿Qué pertenencias de este mundo son necesarias para el establecimiento y la perfección de vuestro ser y de vuestra búsqueda? ¿Cuán blandas y cuán numerosas deben ser tus camas? ¿Cuán redundante tu vestimenta? ¿Cuán llenas deben estar sus habitaciones dentro de sus moradas y cuántas, en efecto, les parecen necesarias dentro de ellas? Mira a la sociedad con la que comercian. ¿Qué exigen de aquellos a quienes han dicho: "los amaré"?

19 de septiembre de 1982

Meditación intensiva

Si empiezas el día haciendo borrón y cuenta nueva y concedes el mismo privilegio a tus amigos y a tus supuestos enemigos, puede que te inspires a ti mismo y a los demás a cambiar. El pasado está tan muerto como los árboles en invierno. La única diferencia es que los árboles volverán cada primavera, pero el pasado se ha ido. Hacer borrón y cuenta nueva te ayuda a cambiar a mejor. Hacer borrón y cuenta nueva con tus amigos y también con tus enemigos les inspira a no repetir sus errores.

5 de septiembre de 1982

Meditación dominical

Hatonn: Amigos míos, les hablamos de las bellezas y las oportunidades de vivir una vida plena y generosa, y de hecho esa es la gran primera parte de la lección de amor: aprehender la naturaleza de vuestro entorno, de vuestro ambiente, de sus oportunidades y de ustedes mismos; aprehender al único Creador infinito en todo lo que les rodea, desde la partícula más pequeña hasta el sonido más lejano del coche distante conducido por un extraño a un lugar desconocido para ustedes. Dondequiera que vaya ese extraño, también vas tú. Estás con todos los seres. Formas parte de todo lo que existe y, sin embargo, las oportunidades para aprender las lecciones del amor son inagotables.

6 de junio de 1982

Meditación del Domingo

Hatonn: Siempre hay una pregunta en la mente de uno que busca sobre el método más apropiado de búsqueda. Y como ustedes en este grupo han oído hablar tan a menudo de la meditación, las preguntas sobre la búsqueda se centran a menudo en cuál es la mejor manera de meditar. En primer lugar, amigos míos, permítannos asegurarles que, por lo que sabemos, no existe la mejor manera de meditar debido al carácter único y maravilloso de cada entidad de la creación. Uno de ustedes puede entrar en meditación mediante simples técnicas de relajación consciente, otro mediante la visualización de una rosa, otro mediante la contemplación de un dicho que le resulte inspirador. Hay tantas formas como personas. Sin embargo, amigos míos, hay señales a lo largo del camino que pueden informarles sobre la naturaleza de su meditación.

18 de abril de 1982

Meditación del Domingo

Hatonn: Estábamos escuchando los sonidos que les rodean, el canto de sus pájaros que ha comenzado de nuevo en vuestra estación de primavera. El ciclo ha girado, la nueva vida comienza. El mundo se hace eco de los sonidos de la naturaleza: una paz hermosa y musical. Amigos míos, si se toman un poco más de su tiempo para sentarse y escuchar en silencio, el mundo que los rodea les hablará de muchas cosas y ustedes, si escuchan, podrán empezar a ser más conscientes de las sencillas y profundas lecciones que les ofrece el mundo que los rodea.